Pero hay un perro ladrando
dentro del agujero del mate
que arrastra sus patas-bífidas delanteras
calcinadas por el agua hirviendo
Entre los chirridos entera
que hay un nuevo pozo cavado
porque los cadáveres se reproducen
como hormigas rojas
que tropiezan montadas
cuando cortan los ramales de artemisa
y los apretan entre labios
como sosteniendo la muerte-palabra
la que llevan a las bocas de sus crías
cada día nebuloso por la tarde
que mastican y atragantan como espinas
los dientes serruchando cada letra desmoldada
con forma de aguja, de pinza, de tijera,
de cueva,de repisa de cajón,
de tiza, de lombriz, de barrote,
de trípode, de percha, de velador.
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