Me gustaría poder ser feliz sin tener que desgarrarme el
alma por ello. No es que tema a la lucha, a la adrenalina de llevar como escudo
la faceta más íntima de mis utopías... Pero es que hay ciertas cosas que no
deberían ser verdad, sino simples figuras de la fantasía, porque su dureza
oprime el florecimiento de cualquier destino más allá de su carcasa.
Comentarios
Publicar un comentario